Investigadores de 6 universidades chilenas, bajo liderazgo de CIESAL, publican importante trabajo de investigación

3/11/2023

La «Environmental Geochemistry and Health», revista holandesa de la editorial Springer acaba de publicar el artículo Oxidative damage associated with exposure to heavy metals present in topsoils in central Chile, que trata sobre la asociación entre la presencia de metales pesados en la zona de Quinteros y Puchuncaví y el equilibrio oxidativo de las personas residentes en esa zona.

Este estudio, liderado por Eva Madrid, investigadora del CIESAL, es el segundo que muestra asociaciones entre la presencia de metales pesados con algún elemento que pueda ser considerado daño sobre la salud de las personas en esa zona. Desde hace al menos dos décadas se ha supuesto y comentado que los contaminantes del núcleo energético-industrial de Ventanas pueden estar ejerciendo algún tipo de daño en la población que habita alrededor del complejo, pero solo un artículo previo (del mismo equipo de investigadores) ha logrado evidenciar algún tipo de efecto (ver publicación).

 

Los investigadores hicieron mapeos de suelos con más de 600 muestras, logrando establecer mapas de concentración de arsénico, plomo y cobre para las comunas de Quinteros, Puchuncaví y Concón. Luego se establecieron como zonas rojas aquellas que excedían en mucho los límites permitidos de presencia de estos metales y zonas verdes aquellas que mantenían metales pesados en niveles dentro de rangos aceptables usando normas internacionales de suelos (Chile no tiene normas de concentraciones máximas de metales en suelo).

 

Posteriormente se tomó muestras de 280 habitantes permanentes que hubieran residido más de cinco años en la zona: 140 voluntarios de zona roja que fueron comparados con 140 habitantes de zonas verdes para poder establecer si existía daño por radicales libres en los tejidos y componentes celulares de las personas expuestas.

Los radicales libres son electrones desapareados que hacen a las moléculas inestables. Los radicales libres en ocasiones se acumulan en las células y dañan otras moléculas, como el ADN, los lípidos y las proteínas. A pesar que el cuerpo humano presenta varios mecanismos de defensa contra los radicales libres, este daño (denominado daño oxidativo) es responsable del envejecimiento celular y es posible que aumente el riesgo de cáncer y otras enfermedades.

En el proyecto se evaluaron tres variables:  daño oxidativo a los lípidos, capacidad antioxidante de las personas y daño al DNA.  Se pudo determinar que no había relación entre vivir en la zona y presentar daño oxidativo a los lípidos, y la capacidad antioxidante se encontraba conservada entre las personas residentes de zonas contaminadas o zonas verdes.

Sin embargo, fue posible establecer–mediante la medición de metabolitos de la guanina, una molécula del DNA– que los habitantes de zonas rojas presentan mucho mayor nivel de daño a nivel de su material genético.  Resultados preliminares de estos estudios han sido presentados por la Dra. Madrid a la comunidad de Puchuncaví y Ventanas, así como algunas presentaciones internacionales, entre ellas en la Universidad de Nueva Gales del Sur en Sydney, la Universidad Autónoma de Barcelona y la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard.

En el proyecto participaron, además, Isabel González de PUCV, ingeniera ambiental quien lideró la toma de muestras y los análisis del suelo, el Dr. Sergio Muñoz de la UFRO, el Dr. Juan Reyes del Instituto de Química de la PUCV, Felipe Martínez de la Universidad Andrés Bello, Felipe Cardemil de la Universidad de Chile, José Pino de la Universidad de Atacama, y Sebastián San Martín del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Escuela de Medicina UV.

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